Victoria Cortez: Despedimos a la primera Obispa Luterana en América Latina y Caribe

Por Claudia Florentin-

Este 26 de setiembre se conoció la partida de la querida Obispa Luterana Dra. Victoria Cortez en Nicaragua. Era Obispa de la Iglesia Luterana Fe y Esperanza desde 2004. Ella fue la primera mujer en el obispado luterano en la región y su ejemplo ha inspirado a muchisimas personas. Agradecemos a Dios por su vida plena y amorosa.

La iglesia Luterana de Costa Rica, la recuerda diciendo:

La Obispa Victoria fue, como Teresa de Ávila, una “fémina inquieta y andariega” que nunca cesó de caminar, dentro y fuera de Nicaragua, compartiendo su palabra poderosa, impulsando proyectos, removiendo conciencias, abriendo senderos y espacios para que nuestras iglesias siguieran caminando por rutas de inclusión y solidaridad arraigadas en el Evangelio de Jesucristo.

La Obispa Victoria sabía leer el alma de la gente y a partir de ahí surgía un sabio consejo, una amonestación -a veces tierna, a veces dura-, o una chispa de picardía que nos hacía reir y reflexionar.

La Obispa tenía muy claro su compromiso con quienes la rodeaban, con la sociedad y la política de su Centroamérica amada.

Recuerdo haber escuchado a la Obispa decir en un video alojado en Youtube:

“La pastoral integral significa seguir el ejemplo de Jesús. Es decir, Jesús vino al mundo a anunciar la buena nueva del reino de Dios, pero a la par de esto, Jesús hacia milagros. Jesús resucitaba, daba de comer, perdonaba pecados, rompía esquemas”.

YO NO ESCOGI SER PASTORA, SOLAMENTE SENTI EL LLAMADO, decía Cortez en una entrevista concedida a Tortilla con Sal (no le gustaban las entrevistas).
 
 No lo busqué, porque tampoco creo que algunos cargos se buscan. En el camino del Señor uno sirve y en el servicio a los demás uno va abriéndose brechas. Ya lo he dicho en muchas ocasiones, que difícil es para nosotras las mujeres abrirnos caminos. La iglesia, como todos los elementos de la sociedad, es patriarcal. Entonces uno tiene que ir abriendo caminos”.
 
 Sobre el ser mujer en comunidades de fe habitualmente dirigidas por varones decía:

“Hay veces que a mí me molesta, que alguien diga llamemos a la Obispa, porque necesitamos que haya una mujer. Ay, ese momento, sí, que me enfurece. Porque yo pienso que nosotras las mujeres necesitamos aprender a tener nuestra autoestima elevada para no conformarnos que nos llamen por ser mujer, sino porque nosotras somos capaces, y hay veces mucho más que los hombres. El ser Obispa, en nuestra Iglesia Luterana, no tiene un sentido de jerarquía, yo me siento que soy la Obispa solamente por tener más responsabilidad de servir.
 
 Yo soy Pastora de Pastores(as) y mi función principal en la Iglesia es, velar por el fiel apego al Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

Y continuaba:

Cuando estamos en una sociedad dominada por hombres, también las mujeres jugamos los roles que la sociedad nos impone. Somos hombres y mujeres con un pensamiento patriarcal. Y por eso es que no es fácil ocupar cargos de dirección, a veces nuestras mismas hermanas, nuestras mismas compañeras son piedras de tropiezo para que uno vaya avanzando. Sin embargo, cuando servimos a Dios y por ende el prójimo la unica estrategia que existe es la de servir. Cuando uno está en el camino del Señor, es El quien va iluminando y nos guía. Entonces, la estrategia es dejarse llevar por el Señor, es saber leer los Signos de los Tiempos.
 
 Sin embargo, un aspecto bien importante para abrirse espacios, en cualquier campo, incluyendo el religioso, es la capacitación y formación, en mi caso, estudiar la doctrina Luterana es fundamental. Porque nadie me va a venir a decir a mí – ¡estás mal! Yo siento siempre como que me examinan en doctirna Luterana cuando algún teólogo luterano conversa conmigo.Yo creo que es importante decir: Estudio para servir a los demás. Porque, amarás al prójimo como a ti mismo, dijo el Señor, es igual que decir, amar a Dios sobre todas las cosas.

Sobre la iglesia Luterana en Nicaragua “Fe y Esperanza”- ILFE

La ILFE, con 33 años de vida, tiene una historia de anuncio, acompañamiento y esperanza. Surge como respuesta al sufrimiento de los/as refugiados/as sSalvadoreños/as quienes afectados/as por la guerra civil en los años 1980 en El salvador,  llegaron como refugiados/as a Nicaragua. Entre ellos y ellas llegó la Victoria Cortez, que junto con otros líderes, formó la Iglesia Luterana Salvadoreña en el Exilio, siendo hasta 1990 que se funda oficialmente la Iglesia Luterana “Fe y Esperanza” de Nicaragua.

El año 1990 los/as refugiados Salvadoreños deciden regresar a su país. La presencia de luteranos nicaragüenses hizo que la comisión formada por Gladys Castillo, Ana María Panameño y Enoe Urbina solicite, a la coordinación de la iglesia conformada el Rev. Ilo Utech de Brasil; el Rev. Kennet  Mahler de EE.UU. y la entonces Licda. Cortez de El  Salvador y Nicaragua, continuar con el trabajo ministerial en el país. “Decidimos quedarnos en Nicaragua inaugurando el 24 de julio de 1990 la primera Iglesia Luterana Nicaragüense en la Comunidad de Dos Cerros en Masaya. En la inauguración fui ordenada  como  pastora de la iglesia y a los dos años ya teníamos 15 comunidades” agrega la Obispa Cortez. Una proyección hacia el futuro les permitió definir el modelo de iglesia contextual inmersa entre campesinos/as y barrios pobres.

Fuente de la historia de ILFE- https://americalatinacaribe.lutheranworld.org/ y ALC Noticias

De amor y sororidad en tiempos de incertidumbre

Foto: iStock

Por Pepa Torres | Cristianisme i Justicia-

¿Se pueden deconstruir los elementos patriarcales (o por lo menos algunos) de la espiritualidad ignaciana desde las aportaciones de la espiritualidad y la teología feminista y la categoría “género”? Este es el “propósito” de la Red Miriam de espiritualidad ignaciana femenina[1], que en el próximo octubre cumplirá 10 años de existencia y 40 años del origen de nuestra matriz originaria, que fueron las congregaciones femeninas de espiritualidad ignaciana.

Uno de nuestros proyectos más consolidados es el Círculo de espiritualidad «Yada»: “Conocer por experiencia”. Este verano hemos celebrado nuestro X Encuentro, con el tema «De amor y sororidad en tiempos de incertidumbre».

En el maravilloso entorno natural de Berriz (Vizcaya), acogidas por el Centro de Espiritualidad Barnezabal (interioridad abierta) de las Mercedarias de Berriz, 24 mujeres de diversos lugares del estado, desde Las Palmas a Galicia, pasando por Albacete, Madrid, Zaragoza, Bilbao o Pamplona, hemos participado en esta experiencia de “cuidado” entre mujeres desde las claves de la espiritualidad ignaciana vivida en femenino y desde la perspectiva de género. Una semana de oración para:

·         Hacer silencio y releer la vida a la luz de la Palabra y de la consciencia corporal (acuerpar la experiencia).

·         Buscar y hallar el Amor en todas las cosas (EE 1).

·         “Aplicar  sentidos” y “gustar internamente”.

·         Reconocer al Amor “nuevamente encarnado” (EE 109).

·         En actitud de discernimiento.

·         Desde la perspectiva de género y en sororidad.

·         Reorientar estilos de vida y compromisos por otro mundo y otras relaciones posibles, convencidas que la experiencia de fe no se puede separar del compromiso con la eco-justicia.

·         Contrastar experiencias en grupo y de forma personalizada.

Un espacio circular, no jerárquico, en el que un equipo de facilitadoras-acompañantes ofrecen orientaciones desde claves bíblicas, espirituales y de consciencia corporal, como “ayudas” para vivir unos días de oración, hacer procesos personalizados y a la vez acompañados, desde la comunidad de mujeres que se va creando a lo largo de la semana. Un espacio que propicia también compartir saberes que brotan del conocimiento vital de las propias participantes. Un espacio circular, construido desde la sororidad, porque como señala Juliana de Norwich, una de las genealogías femeninas que recuperamos en este itinerario espiritual:

«Dios es el punto central del círculo. No hay nadie que lo sea sino Él. Todo esto me lo mostró con gran gozo diciendo: “Mira, yo soy Dios. Mira, que yo estoy en todas las cosas. Mira, yo hago nuevas todas las cosas. Mira, nunca retiro las manos de mi trabajo no lo haré nunca por toda la eternidad. Mira, yo llevo todas las cosas al fin que he preparado para ellas. Hago esto con la misma sabiduría amor y poder con que la creé. ¿Cómo puede haber algo hecho que no esté bien hecho? Dios quiere que sepamos que Él-Ella nos mantiene a salvo en lo bueno y en lo malo. (…) Él-Ella es nuestra vestidura. Nos arropa y nos envuelve en su amor. Nos abraza en su amor y no nos soltará jamás» (Libro de las visiones y las Revelaciones).

La experiencia que se va trenzando a lo largo del encuentro se hace a partir de seis mimbres fundamentales:

·         La Palabra de Dios como partera de transformaciones profundas. De ahí la centralidad de las orientaciones bíblicas y los pasajes del Evangelio propuestos para las meditaciones y contemplaciones e interpretados desde una exégesis feminista.

·         La historia y, en concreto, la historia de las mujeres. Las genealogías femeninas que vamos recuperando. Mujeres que nos han precedido, maestras de vida y espiritualidad desde la profundidad y la libertad de sus textos.

·         Nuestras propias historias, momentos vitales y coyuntura histórica, donde sigue aconteciendo la encarnación, porque como señala Dorothy Day: «la encarnación es ahora, la encarnación es hoy». 

·         La Palabra de nuestros propios cuerpos y del cuerpo de la tierra, como cuerpo de Dios (Sally Mcfague), así como los ejercicios de consciencia corporal, que nos ayudan a escucharlo.

·         La necesidad de celebrar creativamente la vida, la reconciliación, la fraternidad y sororidad humana, la comunión con la naturaleza la utopía en la que la Ruah nos empuja a seguir embarrándonos los pies, el corazón, los sentidos, la inteligencia y los afectos en ella desde la sabiduría del discernimiento.

·         La iconografía y diversidad de imágenes femeninas que nos han acompañado en el itinerario de cada día y que nos recuerdan que la belleza y la creatividad son manifestaciones de la Sophia de Jesús y “ayudas” para adentrarnos en la fuente del ser.

Los temas que hemos ido gustando internamente en este Yada 2023 han sido:

·         Cuidar el corazón: espiritualidad, cuidado e incertidumbre.

·         Enraizadas en el amor (el amor como principio y fundamento).

·         Acuerpar el amor. Cuerpo de mujer, cuerpo de la tierra. El amor se hace vínculo y sororidad. Jesús, una masculinidad alternativa.

·         Heridas de vida. Sororidad y vínculos entre mujeres.

·         El amor se hace justicia y cuidado. Amistad social y amor político. Hasta que la vida sea un banquete: pan lucha, fiesta: La Misa de las mujeres.

·         Amar hasta el extremo.

·         Renacer desde dentro.

·         Memoria del corazón y envío: Recoger nuestros pasos.

Las genealogías femeninas que nos han acompañado en este camino han sido: Madeleine Delbrêl, Hadewijch de Amberes y las beguinas, Margarita Maturana, Rut y Noemi, la mujer del perfume, Etty Hillesum, la samaritana, Exeria, Dorothy Day, las mujeres al pie de la cruz, Maria Skobtosova. María de Magdala y las mujeres portadoras de perfumes del Evangelio…

También desde el compartir saberes vitales de las mujeres participantes surgió una noche un rico conversatorio sobre dos realidades fronterizas que nos desafían como mujeres en la iglesia y en la sociedad civil: feminismo y antimilitarismo ante la realidad de la guerra de Ucrania y tantas guerras invisibles en el mundo y los avances y desafíos de la pastoral de la diversidad sexual desde Euskadi.

En definitiva, una rica y sanadora experiencia que nos remite nuevamente a la pregunta inicial con que comenzaba este texto: ¿se pueden deconstruir los elementos patriarcales de la espiritualidad ignaciana desde las aportaciones de la espiritualidad y la teología feminista y la categoría “género”? Desde la Red Miriam de espiritualidad femenina estamos convencidas que merece la pena no cejar en el intento de hacerlo. Necesitamos recuperar la libertad y la osadía de ser contemplativas en la acción, contemplativas en la relación, más allá del patriarcado.

Seguimos…

[1] https://redmiriam.blogspot.com/

[Imagen de Freepik]

La autora es Religiosa, teóloga y educadora social. Activista en diversos movimientos sociales vinculados especialmente al feminismo y al trabajo por los derechos de las personas migrantes. Es miembro de la Red de Apoyo Interlavapiés y de la Red Myriam de espiritualidad ignaciana femenina, entre otras asociaciones.

https://blog.cristianismeijusticia.net/2023/09/04/de-amor-y-sororidad-en-tiempos-de-incertidumbre

¿¡Ustedes mujeres…callen!?

Graciela Mabel Lairihon, Argentina-

1 Corintios 14:34-35 Versión Reina-Varela 1960

Detalle de texto miniado del siglo XIV, contraforma de una letra mayúscula P, al inicio de los Elementos de Euclides, en una traducción atribuida a Adelardo de Bath. Una mujer lleva una escuadra en una mano y usa con la otra un compás para medir las distancias en un diagrama. Un grupo de monjes, aparentemente sus estudiantes, la observan. En la Edad Media, la representación de la mujer en un papel de docente es inusual. Wikipedia

“…vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido

hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo dice. Y si quieren

aprender algo, pregunten en casa a sus maridos; porque es indecoroso que

una mujer hable en la congregación.”

La mujer es o debe:

1. ser posesión del varón

2. callarse en público

3. se le prohíbe hablar

4. sujetas a dominación masculina

5. sus esposos deben ser la única fuente de aprendizaje

6. pierde decoro o respeto si habla en público

La mujer según el texto padece:

cosificación

esclavitud

falta de libertad

ignorancia

su comportamiento respetuoso depende si habla o no.

Sobrevaloración y empoderamiento del hombre en desmedro de la mujer.

Hoy este mensaje es misógino, violento, cercenador de libertad individual, destructivo de la autoestima femenina. retrógrado. alienante.

Dios y Jesús no pueden ser los autores de esta barbarie.

Los hombres-muchos de ellos-han usado su “Firma” para tener poder sobre las mujeres y usarlas física e intelectualmente para su provecho.

El hombre y la mujer son creación divina. Se deben respeto mutuo y valoración.

Escudriñar las escrituras es analizar con mucha atención los aspectos profundos de un texto. Esto debemos hacer.

La mujer no tiene reducido su entendimiento. Dios no la creó con menos inteligencia que el hombre. Tanto el hombre como la mujer son capaces, libres y responsables por sí mismos.

La interpretación distorsionada, solo busca sometimiento hacia la mujer destruyendo su vida, desarrollo, vínculos, talentos, salud psíquica y física.

No es así el mensaje de Dios, Él valora su creación – hombre y mujer – y la Verdad es el camino hacia la libertad.

Mantengamos nuestra mirada despojada de prejuicios y mitos que nos infundieron y dañaron y aún lo siguen haciendo con tantas mujeres.

Despertar para crecer en libertad y honrar con nuestras vidas al Dios Verdadero.

Publicado en el Devocional Caminando en Sororidad 2023

Informe Evangélicos y Política

La importancia de las espiritualidades en el escenario global contemporáneo es un hecho irrefutable. En América Latina, es difícil aislar la religiosidad de los profundos cambios en la sociedad civil: la religión en nuestro continente es, ante todo, una práctica persistente y masiva. En América Latina y el Caribe, la fe se vive en el espacio público, en la intimidad del hogar, en los más diversos grupos y colectivos; quizás por ello, abarcar la pluralidad de religiones y las politizaciones que de ellas se derivan es un desafío central, tanto para las ciencias sociales y humanas como para el universo de las organizaciones populares y los movimientos sociales en América Latina.

Con esta perspectiva, Tricontinental: Instituto de Investigaciones Sociales y Otras Cruces lanzan el informe EVANGÉLICOS Y POLÍTICOS | Estudios sobre espiritualidad y movimientos sociales en América Latina, cuyo objetivo es analizar la relación entre fe y movimientos sociales en nuestro continente.

A través de entrevistas con activistas de movimientos sociales, religiosos y personas involucradas en comunidades evangélicas, explora las formas en que las creencias religiosas influyen en la participación política de los movimientos sociales, así como las principales formas en que los movimientos perciben y utilizan la religión en su lucha por los derechos humanos. También examina cómo las prácticas religiosas cotidianas se relacionan con la construcción de la identidad y la resistencia a la opresión en América Latina y el Caribe. Este informe constituye una valiosa herramienta para comprender

La importancia de las espiritualidades en el escenario global contemporáneo es un hecho irrefutable. En América Latina, es difícil aislar la religiosidad de los profundos cambios en la sociedad civil: la religión en nuestro continente es, ante todo, una práctica persistente y masiva. En América Latina y el Caribe, la fe se vive en el espacio público, en la intimidad del hogar, en los más diversos grupos y colectivos; quizás por ello, abarcar la pluralidad de religiones y las politizaciones que de ellas se derivan es un desafío central, tanto para las ciencias sociales y humanas como para el universo de las organizaciones populares y los movimientos sociales en América Latina.

Decargue aqui el informe en español.

Con Información de ALC Noticias

Mujeres y Biblia: Propuestas de reflexión y producción para una Teología popular y feminista

Este material surge del equipo de mujeres educadoras y teólogas que desde hace 20 años animan los Encuentros Nacionales de ̈Género y Biblia ̈ en Argentina.

La perspectiva de trabajo es popular, ecuménica, crítica y liberadora; totalmente autónoma de toda institución educativa, política o religiosa.

Compartimos la edición del Tomo 2 de Círculos de Mujeres y Biblia que contiene:

Módulo 3 Acompañarnos como mujeres y 

Módulo 4 Como a tí misma

Libre descarga aqui https://ctrajab.files.wordpress.com/2023/09/muj-y-biblia-modulo-3-y-4.pdf

Cambio climático y migración en el Altiplano Norte de Bolivia

Ximena Flores Palacios ha publicado recientemente en el Boletín #7 Movimientos migratorios sur-sur. Fronteras, trayectorias y desigualdades de la CLASO.

El trabajo se   enfoca en los vínculos entre el cambio climático y la migración en el Altiplano Norte boliviano, mostrando cómo condiciones climáticas extremas, escasez de recursos y factores socioeconómicos impulsan la movilidad de la población y las diferentes estrategias adoptadas por las comunidades para adaptarse a estos desafíos. 

Les comparto el enlace para que descarguen el documento: https://www.clacso.org/boletin-7-movimientos-migratorios-sur-sur-fronteras-trayectorias-y-desigualdades/

Hacia nuevas masculinidades

Ilustración: Xiomara Parra

Por SOFÍA LEILA PEÑA

Establecido en 1992 y popularizado en 1999, el Día Internacional del Hombre busca concientizar sobre la salud de los varones y mejorar las relaciones de género promoviendo expresiones positivas de masculinidad más allá de la hegemonía. Esta fecha nos invita también a repensar y celebrar a aquellas masculinidades que son vulneradas, como los homosexuales, bisexuales, transgénero o las personas masculinas no binarias.

El feminismo ha mostrado a lo largo de los años que los varones poseen un claro privilegio ante las mujeres. Basta con ver las estadísticas de cuántos hombres son asesinados por su género en manos de mujeres, o cuántos de ellos son cuestionados por su elección a la hora de tener o no hijxs. Los ejemplos pueden ser miles y se entiende que para las mujeres la realidad es muy distinta. Y es por esto que quizá uno podría cuestionarse, ¿por qué un Día del Hombre? ¿Acaso no son todos los días un recordatorio de este privilegio?

Pero como ha dicho la influyente antropóloga feminista Rita Segato, “nuestros enemigos no son los hombres, sino el orden político patriarcal”. Con respecto a este punto, Benjamín Pereira de Hombres contra el Patriarcado sostiene que “para que haya igualdad, los privilegios deben desaparecer, y claro, cuando estás acostumbrado al privilegio, la igualdad se siente como opresión”.

Para Pereira, es necesario distinguir entre privilegio (opinar sobre el cuerpo de una mujer o no implicarte en los cuidados familiares sin ningún tipo de consecuencia) y derecho negado (caminar por la calle sin miedo a que te violen y te maten). “Cuando hablamos de acabar con nuestros privilegios no pedimos tener las mismas opresiones que las mujeres, sino el cese de las ventajas que disponemos por el mero hecho de ser percibidos como hombres. Es por eso que debemos responsabilizarnos de manera activa en la igualdad, y para ello, aparte de compartir intelectualmente que vivimos en una sociedad machista, debemos llevar a cabo acciones antipatriarcales. Empezar a señalar, dejar que nos señalen, y cuestionar la imposición de los mandatos como proveedores, protectores, procreadores y autosuficientes que la sociedad espera de nosotros, por otras maneras de relacionarnos basadas en los cuidados y los autocuidados”, puntualiza.

La verdad es que las masculinidades son tan diversas como las feminidades. Sin embargo, al día de hoy sigue pesando un modelo determinado de hombre visto desde la hegemonía. Pero la fluidez de género ha venido a desafiar esta noción de las divisiones binarias y lo que supone que es ser “hombre”. Pereira afirma que la masculinidad nunca ha existido en singular. “Siempre han sido diversas, múltiples. Nunca se ha podido entender con la misma masculinidad la forma de ser hombre globalmente. Como tampoco ha sido la misma la masculinidad obrera de la Inglaterra de los ochenta que la masculinidad gay de la misma época y el mismo país, por ejemplo. Lo que pasa es que hasta hace relativamente poco, el discurso sobre lo que debía ser un hombre, era más férreo y unívoco. Pero ¡ojo! Que hubiese un solo discurso no quiere decir que solo hubiese un tipo de hombre. Las otras masculinidades seguían existiendo pero en las sombras”, dice.

La importancia de visibilizar esas otras masculinidades es doble: por un lado, fractura y debilita la idea de la masculinidad hegemónica demostrando que existen otras formas (algunas mucho más sanas e incluyentes) de ser hombre. Y por otro lado, permite a aquellos varones que no se adaptan a los modelos hegemónicos poder desarrollar otras formas legítimas de ser.

Algunos varones sienten la presión de cumplir con el estereotipo. Este último suele ser catalogado como “masculinidad tóxica”. Sin embargo, este término perpetúa la asociación entre la toxicidad y los rasgos masculinos, como si la identidad de los varones tuviera rasgos que son “naturalmente” violentos. Y si bien el concepto tradicional de lo masculino ha cambiado a lo largo de los años, una constante en este modelo es rechazar la idea de que los hombres puedan ser femeninos. Este miedo y negación enfática de lo femenino (por lo general asociado a la homosexualidad, y por lo tanto, ser “menos hombre”), en realidad lo que oculta es un rechazo hacia esa otredad “inferior”; ya que lo relativo a esos dos mundos sigue siendo objeto de burla y humillación. Para los hombres cis heterosexuales es mucho más difícil mostrarse vulnerables porque eso significaría actuar fuera del rol de género prescrito.

Esta falta de demostración de vulnerabilidad puede resultar muy dañina para los varones, más cuando atraviesan problemáticas de salud mental. Según un estudio del 2018 realizado por la BBC, los hombres tienen cuatro veces más posibilidades de morir por suicidio en nuestro país. Uno de los factores es la falta de comunicación, y esto es porque, mientras a las mujeres se nos enseña a ser expresivas y sentimentales, los varones todavía tienen el mandato de ser fuertes y no mostrar debilidades. Esto hace que sea menos probable que estén conscientes de sus problemas, y aún menos, puedan manifestarlo a tiempo para conseguir ayuda.

Vivimos en una sociedad patriarcal y capitalista que nos atraviesa queramos o no. Y que esto sea de esta manera hace que tengamos interiorizados una serie de mensajes y prácticas que normalizamos, pero que tienen todo un trasfondo machista y generador de desigualdades. “En el caso de los hombres, vivimos y crecemos rodeados de publicidad sexualizada, series y películas heteronormativas cuyo éxito de los protagonistas se basa en el dinero y las mujeres que poseen, expresiones y dinámicas familiares e incluso nuestra educación sexual se basa en el porno. Todo ello al final acaba reflejándose en situaciones en las que sentimos que la autorrealización personal se produce a través de trabajo remunerado, con altas dosis de agresividad, competitividad y dominación, disponibilidad perpetua para mantener relaciones sexuales, ahora bien, sin depender ni confiar en nadie y sin mostrar ningún tipo de vulnerabildad”, comenta Pereira.

El patriarcado oprime a las mujeres, y por otro, reprime a los hombres. Esta represión viene dada por el cumplimiento de una serie de mandatos, por ejemplo, el rol de proveedor material, que los aleja completamente de los cuidados y autocuidados. El rol de protector presiona a un paternalismo y una expectativa de dependencia y necesidad por parte de las personas a las que deben proteger (básicamente mujeres y niñxs). Esto los empuja a asumir peligros para demostrar “valentía” o al uso de la fuerza física. En cuanto el rol de procreador dicta que “un hombre de verdad” siempre tiene que estar dispuesto a tener relaciones sexuales, en las que éstas tienen que girar en torno al pene, y que cuantas más experiencias, más hombre es.

Por último, el rol de la autosuficiencia en el que todo se debe conseguir sin necesidad de ayuda, en el que además, se debe mostrar fuerza, independencia y poder. En general, el patriarcado fomenta y premia el seguimiento de dichos roles, y si cumplen, serán hombres exitosos (o por lo menos eso les hace creer). La represión del patriarcado a los hombres es el precio a pagar por tener el poder en la sociedad.

Por todo esto, el Día del Hombre sirve para celebrar las diversas masculinidades y recordar que ser hombre no significa tener que cumplir con la norma patriarcal. “En la actual cultura occidental, acostumbramos a que si hay un Día Internacional es para la visibilización de una opresión o un colectivo oprimido (a excepción de los días señalados por la iglesia). Ser hombre en nuestra sociedad patriarcal te coloca en situación de privilegio por el mero hecho de serlo, por lo que es difícil pensar en qué transmitir”, analiza Pereira.

“No obstante —agrega— si tenemos que visibilizar algo es que no pasa nada por no seguir los mandatos de género. No somos menos hombres por implicarnos en los cuidados no remunerados o cuidar tu salud. No ‘tenemos que ser’ protectores de nadie, héroes o valientes. Somos vulnerables, no tenemos que querer siempre tener relaciones sexuales, y si las tenemos, van mucho más allá del ‘metesaca’ de porno mainstream”.

Entonces, ¿es posible empezar a relacionarnos desde la cooperación y no desde la competición violenta y agresiva? Pereira enfatiza en que habría que cambiar la fecha. “Noviembre es un mes de visibilización de una de las puntas del iceberg del patriarcado, la violencia machista. Y que esté fijado el 19N el día del hombre, cuando falta menos de una semana para el Día internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, nos pone en una situación muy complicada, ya que hacer cualquier acción puede ser interpretada (y con razón) como un intento de invisibilización/atenuante de la violencia de género, un not all men o incluso la búsqueda de un aplauso fácil por ser un adulto funcional”, concluye Pereira.

Es necesario en este día visibilizar formas de ser hombre más reales, más humanas, y no tanto ese “deber ser”. Las diversidades masculinas muestran que no hay una única manera de ser varón, que los hombres trans, no binarios, gays y bisexuales existen. Y ellos también muestran alternativas para lxs más chicxs, en donde en lugar de demonizarlos, se celebren las diferencias. Ya lo decía Kelley Temple, activista feminista del Reino Unido: “Los hombres que quieren ser feministas no necesitan que se les dé un espacio en el feminismo. Necesitan tomar el espacio que tienen en la sociedad y hacerlo feminista”.

Fuente: https://feminacida.com.ar/hacia-nuevas-masculinidades/

“Argentina no es racista”: destruyen el homenaje a Remedios del Valle, la madre de la Patria

En San Telmo, Buenos Aires, la obra en homenaje a Remedios del Valle, la mujer afrodescendiente que formó parte del Ejército de Norte, fue quemado en su totalidad. Hubo repudio del Ministerio de Cultura. Representantes de la comunidad afroargentina consideraron que esta acción “forma parte de la multiplicación y naturalización de los discursos de odio en nuestro país”.

La Agrupación “EntreAfros – Afrodescendientes de Entre Ríos- repudia lo sucedido, diciendo “el VANDALISMO es VIOLENCIA, provenga de donde provenga, y el racismo también.

En momentos tan complejos, estos actos sólo dejan ver que ARGENTINA ES UNA PAÍS RACISTA y que existen muchos ciudadan@s que prefieren “ignorar” la responsabilidad que implica tener un ESTADO DEMOCRÁTICO y respetar la diversidad étnico racial de su pueblo.

“La comunidad está conmocionada con este acto de vandalismo inaceptable. Es terrible encontrarnos con esta noticia. Ayer, 31 de agosto, fue una conmemoración sensible para la comunidad como lo es el día internacional de los Afrodescendientes, que conmemora el legado de la africanidad en todo el mundo, que refleja la importancia de reivindicar y reconocer con políticas afirmativas a nuestra comunidad históricamente vulnerada en sus derechos humanos. Por eso esta violencia racista no es casualidad, forma parte de la multiplicación y naturalización de los discursos de odio en nuestro país”, manifestó Maga Pérez, directora de la Comisión para el Reconocimiento Histórico de la Comunidad Afroargentina, del programa Afrodescendientes del Inadi.

“La negación del racismo es grave en nuestra sociedad. Hay acciones concretas, vulneración de derechos, expresiones discriminatorias y racistas en nuestra vida cotidiana que es urgente que toda la sociedad reflexione y se sume contra toda violencia. Las trayectorias de vida de las personas afrodescendientes son difíciles de transitar producto de los prejuicios y estigmas que violentan nuestra existencia”, advirtió la dirigente.

El monumento había sido inaugurado el 8 de noviembre de 2022 -cuando se celebra el Día Nacional de las y los afroargentinos y de la cultura afro- en la plazoleta ubicada en Bernardo de Irigoyen y Estados Unidos, “fue quemado en su totalidad de forma cobarde y anónima”, señaló el Ministerio.

La obra medía 3,70 metros con el pedestal, pesaba 80 kilos y fue realizado en impresión 3D con resina y laca poliuretánica.

La historia de Remedios del Valle
María Remedios del Valle había nacido en Buenos Aires en 1766, en el seno de una familia de origen afrodescendiente, y formaba parte de los sectores populares y subalternos de la colonia. Junto a su marido e hijos formó parte del Ejército del Norte en la primera expedición al Alto Perú, al mando de Manuel Belgrano.
Por su coraje y valentía, Belgrano le confirió el grado de capitana del Ejército, y con ese cargo participó del frente de batalla en el cuidado y atención de soldados en las victorias de Tucumán y Salta (1812 y 1813), y en las derrotas de Vilcapugio y Ayohuma (1813).

Perdió a su familia en combate y, una vez terminada la guerra, regresó a la ciudad de Buenos Aires, donde padeció la indigencia. Su figura fue sometida durante largo tiempo al silenciamiento en el relato histórico de las y los héroes de la Patria. La vejez de María Remedios transcurrió en la pobreza material y privada de reconocimientos oficiales, hasta que la Sala de Representantes de la Provincia de Buenos Aires le concedió el cargo de sargento mayor de caballería en 1829.

Más tarde, el gobernador de Buenos Aires, Juan Manuel de Rosas, decretó su jerarquía de mayor de caballería y le aumentó su pensión de 30 pesos a 216 pesos. Ella, por gratitud hacia quien la sacó de la miseria, cambió su nombre por el de Remedios Rosas.

Murió el 8 de noviembre de 1847, sin haber recibido en vida el reconocimiento merecido, y en esa fecha, a partir de la sanción de la Ley 26.852 y en homenaje a su figura, se conmemora en Argentina el Día Nacional de las y los Afroargentinos/as y de la Cultura Afro.

Fuentes: P/12 y propias

https://www.facebook.com/xango.agrupacion/?locale=es_LA