Consejo Mundial de Iglesias y familia Reformada piden respeto de los DDHH, especialmente de las mujeres en Afganistán
El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) expresó su preocupación e hizo un llamamiento a las oraciones por el pueblo de Afganistán mientras crece el temor a la violencia y la opresión.
“Las personas que ya han sufrido durante décadas el conflicto armado, el desplazamiento, la opresión, la corrupción y el mal gobierno se han visto sumidas de nuevo en el miedo y la incertidumbre como resultado de los dramáticos acontecimientos de los últimos días”, dijo Marianne Ejdersten, directora de comunicación del CMI, en nombre del Rev. Prof. Dr. Ioan Sauca, secretario general en funciones del CMI y actualmente de vacaciones.
Rezamos especialmente por las mujeres y las niñas de Afganistán, para que su dignidad, sus derechos y sus aspiraciones no vuelvan a ser negados, sino que puedan tener el acceso a la educación y a los derechos y libertades que les han prometido tanto los gobernantes como la comunidad internacional”.
La Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (CMIR) llama a sus iglesias miembros a orar por el pueblo de Afganistán.
Desde la retirada de Afganistán de las fuerzas dirigidas por la OTAN, el conflicto armado entre el gobierno afgano y los talibanes ha provocado que los talibanes se apoderen del palacio presidencial en Kabul y finalicen su control sobre el país.
Esto se produce después de veinte años de presencia de las fuerzas de la coalición en Afganistán después de la "guerra contra el terror" que sucedió a los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001. Ya sobreviviendo al gobierno inicial de los talibanes después de la ocupación soviética del país, Afganistán ha sido el lugar de guerras y conflictos brutales desde hace varias décadas.
Escenas desgarradoras de personas que acuden en masa al aeropuerto en un esfuerzo por huir del país han inundado los medios de comunicación, llamando la atención sobre la situación desesperada del pueblo afgano y la situación particularmente vulnerable de las mujeres y los niños y de los que se consideran colaboradores de las fuerzas occidentales que ahora se han retirado. También son vulnerables las minorías religiosas y confesionales en Afganistán.
La CMIR pide el respeto de los derechos humanos y, en particular, los derechos de las mujeres en Afganistán. Pide a la comunidad internacional que ofrezca ayuda humanitaria y hospitalidad a quienes huyen del país.